Un whisky único. Es el primer whisky del mundo envejecido, en una segunda maduración, en barriles de cedro japonés Yoshino Sugi, madera con una agradable fragancia, por siglos utilizada para la construcción de templos en Japón. Es un whisky embotellado a 48% y “non chillfiltered”, no ha sido tratado con muy bajas temperaturas antes del embotellado, para conservar todo su sabor genuino. El alcohol con el que se elabora el whisky Kamiki procede de Shrmiwa Shrine en Nara uno de los santuarios sintoístas más antiguos de Japón y un santuario tutelar de los productores de alcohol japoneses. La mayoría de las familias conocidas de productores de alcohol están en Nara, estas familias tienen una tradición centenaria de producir alcohol para Omiwa. El alcohol producido por estas familias se sirve como bendiciones en los templos sintoístas. Los whiskys de malta japoneses cuidadosamente seleccionados se mezclan con algunos de los mejores whiskys de malta de todo el mundo, fusionando esta mezcla con agua pura de manantial de la región de Kansai. Envejecido en dos etapas, la segunda en barriles de Yoshino Sugi, considerada la mejor madera para hacer barriles debido a su aroma refrescante perfumado y aroma de madera. Color ámbar brillante. Aromas de manzanas, melocotones, miel, frutos secos, te verde, turba y ligeros tostados. En boca notas cítricas, turba, miel de cedro, frutos secos,vainilla, pimienta incienso, jengibre y sándalo frescos del cedro. Si bien este whisky no especifica años, los japoneses hacen sus whiskys en base a los lineamientos de Escocia por lo que como mínimo las maltas que componen este whisky tuvieron 3 años de estacionamiento en barricas.
