Un vino de intensa fragancia y gran belleza aromática en el que se destaca una atractiva amalgama de violetas y pétalos de rosa, tomillo silvestre y rúcula picante. Se destacan frutas negras, especias y grafito, que aportan solidez, en contraste con la energía de sus vibrantes frutos rojos. Su pureza cristalina entra en juego con un contundente y sabroso carácter agreste para conferirle un halo de misterio. El gran poder seductor de su textura sedosa se ve fortalecido por la firme presencia de taninos y tiza, características que expresan mejor que nunca las peculiaridades del clima fresco y la altitud de los viñedos de Gualtallary.
Graduación alcohólica: 14.6 % pH/acidez: 3.59 - 6.47 g/l Azúcar residual: 2.30 g/l
Potencial de guarda: Este vino evolucionará de manera positiva por hasta 15 años.
TEMPERATURA DE SERVICIO: Servir a una temperatura entre 16 y 18 °C.