Especialistas en la producción de grandes vinos franceses, la familia Cuvelier es propietaria, dentro de la región de Bordeaux, de Chateaux Leóville-Poyferré y de Chateau Le Crock desde 1903. Conquistados por la calidad de los vinos de la región de Mendoza, Bertrand y Jean Guy Cuvelier plantaron viñedos en las laderas de la Cordillera de Los Andes. Las cosechas son manuales. Este vino es parcialmente criado en barricas de Roble Francés durante 11 meses y cuenta con el asesoramiento de Michel Rolland para su elaboración.